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Tatuajes con estilos Black & Grey

Tatuajes de Estilo Black&Grey

¿Qué es el estilo black&grey?

Si te gusta ver la vida en escala de grises –o si pones todas las fotos de tu feed en blanco y negro porque te hace sentir más edgy– no hay mejor match para ti que el estilo black&grey. También llamado jailhouse (“cárcel” para los que no tengáis el First) o joint style, consiste en trabajar exclusivamente con tinta negra en diversas intensidades, diluyéndola en agua destilada. Otra opción es recurrir a la tinta blanca para esclarecer la oscura, que actúa como base. Sea cual sea la técnica que se siga, se logran tonos diferentes que aportan un nivel de detalle increíble a cada pieza y un sombreado fuera de serie.

Como ves, es un estilo parecido al blackwork porque ambos comparten el uso de tinta oscura. Pero esta vez no todo es blanco o negro, si no que hay medias tintas. Nunca mejor dicho. Y esas son las distintas tonalidades de grises. Voilà.

El origen del estilo black&grey

Los primeros pasitos de este estilo datan de los años setenta y ochenta, nada más y nada menos que en las cárceles estadounidenses. Seguro que esta no te la esperabas, ¿eh?

Los reclusos lo tenían que hacer en secreto, evidentemente, porque estaba prohibido y tenían que apañarse para conseguir los materiales. Agujas con cuerdas de guitarra, tinta con ceniza de cigarrillo… todo un despliegue DIY a la altura de cualquier youtuber. O de Art Attack, que nos gusta más. Pero vaya, nada que no hayamos hecho muchos al tatuarnos por primera vez, intentando ocultar la obra a nuestra madre. Siempre, SIEMPRE, te lo pilla en a ducha. No te molestes en intentarlo.

En qué zona tatuarse en estilo black&grey

Aunque el black and grey decorará armoniosamente cualquier parte de tu cuerpo, lo cierto es que queda de lujo en zonas grandes donde se puedan apreciar sus detalles. Pechos, muslos, mangas enteras… En resumen, lienzos más o menos lisos sobre los que el tatuador pueda lucirse al máximo con piezas potentes.

Si sigues empeñado en ocultarle el tatuaje a tu madre, la espalda es muy buena opción para diseños grandes que no serán siempre visibles al ojo humano. A no ser que tenga visión por rayos X, que ya sabes que con ellas nada se puede descartar. Si quieres ir sobre seguro y tatuarte algo más pequeñito, el antebrazo es una zona que no suele doler demasiado y que además vas a poder lucir por la calle cuando llegue el calor. Todo son ventajas.

Cuando te hayas probado el diseño que te gusta en todas las partes del cuerpo con Photoshop (recursos, querida) y hayas seleccionado la ganadora, te recomendamos que después de tal esfuerzo gráfico no la líes a la hora de la verdad. El black and grey es un estilo que requiere dominio de la aguja, así que el artista que marque tu piel para siempre debe de estar capacitado para bordarlo. Después vienen los llantos y los gritos de auxilio –que recibimos diariamente, lo juramos– rogando un cover, y no vale la pena sufrir por algo que debería hacerte feliz al mirarte al espejo todas las mañanas.

Ya que tu madre lo va a descubrir tarde o temprano, mejor que al menos no te dé vergüenza enseñárselo. Que lo vea chulo, a pesar de haber ensuciado la piel de su adorado retoño. Se acostumbrará (o eso esperamos). Para que supere el shock inicial rapidito y lo acepte como uno más en la familia, rellena este formulario y te ayudamos a encontrar al mejor artista especializado en esta técnica cerca de ti. Que como mínimo se quede tranquila sabiendo que lo has consultado con expertos.

El origen del estilo black&grey

Como puedes leer en este post, el tatuaje chicano es una seña identitariade los primeros mexicanos que se atrevieron a cruzar la frontera para encontrar un futuro mejor en Estados Unidos. Unos valientes en toda regla que además se sacaron de la manga un pedazo de estilo de tattoo e impulsaron el black and grey a límites insospechados. Osados y con rollo, nuestro tipo de gente favorita.

Los símbolos que predominan en los diseños chicanos reflejan esa dualidad inherente en su persona, combinando sus raíces latinoamericanas con el amor que sienten por su país adoptivo y la ciudad de su vida: Los Ángeles. Referencias al catolicismo y a las pandillas (una de cal y otra de arena, por supuesto que sí), banderas, coches, catrinas, el Hollywood Sign… la lista es larga. Y muy guay para coger inspo para futuras piezas. ¡Que viva México, cabrones!